DE LA IRRESPONSABILIDAD EN EL GASTO Y LA FALTA DE FISCALIZACIÓN INSTITUCIONAL

Los temas de transparencia y rendición de cuentas, en cualquier administración de gobierno y entes públicos, son requisitos indispensables para procurar una buena marcha de las acciones institucionales que se desarrollan, porque son generadoras de certidumbre jurídica, credibilidad social, además de que crean un ambiente de confianza para la inversión privada.

En Chihuahua contamos con estos valores, pero es necesario que se incorporen otros temas más que tengan que ver con el buen manejo de los recursos públicos y sobre todo en una buena fiscalización de lo que se hace con el dinero de los ciudadanos que de manera temporal disponen los funcionarios en turno.

Varios casos de corrupción se han hecho públicos en diferentes secretarías del Gobierno del Estado; la primera en la Secretaría de Salud, donde una sola persona simplemente se embolsó más de un millón de pesos y se fue a su casa y no fue hasta después de un tiempo, cuando finalmente se dieron cuenta del faltante.

Una más, de un funcionario que prestaba sus servicios en la Fiscalía Estatal y seguramente por necesitarlo, tomó el dinero de una de las fianzas que se dejan en custodia para que una persona pueda enfrentar un proceso en libertad y se lo gastó.

En la Dirección de Vialidad, se conoció el caso de la falsificación de documentos oficiales para autorizar la salida de vehículos que se encontraban en los corralones, sin que la autoridad lo supiera; se dice que esta práctica se venía haciendo desde hace mucho tiempo y que le representaba enormes ganancias económicas a los involucrados.

Otra más, de una abogada adscrita a la dirección de la defensoría pública, que además de recibir su pago por parte de Gobierno del Estado, cobraba a las personas que representaba, para asegurar que sus asuntos avanzaran.

A principios de este año, el gobierno del Estado aprobó un programa de ajuste presupuestario en todas las secretarías y entes gubernamentales que recibieran recursos públicos, implementando un recorte a los viáticos; una total suspensión de pagos extraordinarios por horas extras y otros cargos; una reducción de la plantilla laboral; un cambio de vehículos de gran consumo de gasolina por de menor cilindraje, así como nuevas medidas de control para evitar la fuga de recursos y gastos superfluos.

Sin embargo, como se advierte, las medidas no han funcionado y lo que podría ser peor, ni siquiera se han implementado, porque lo que se conoce hasta ahora, podría ser solamente la punta de una gran bolsa de asuntos de corrupción y desvío de recursos, que en las actuales condiciones de apremio económico, constituye un verdadero crimen.

El Gobernador Cesar Duarte ha establecido que la prevención es mejor que la sanción, pero al no existir lo primero, lo que queda es la persecución de los delitos realizados, los cuáles en la mayoría de los casos, es prácticamente imposible devolver el dinero, porque simplemente se lo han gastado.

¿A quien corresponde la vigilancia de los recursos y su correcta aplicación; quien es o quiénes son los responsables de implementar medidas de fiscalización para evitar que cualquier funcionario pueda disponer de más de un millón de pesos, sin que nadie lo advierta; a quien le toca supervisar que las medidas que se toman para evitar estos actos de corrupción, verdaderamente se lleven a cabo?

No hay duda de que a este gobierno le ha tocado enfrentar serios problemas con la delincuencia, la enorme sequía y después las inundaciones, para enfrentar ahora la corrupción de sus funcionarios, la ineficiencia de las medidas de control supuestamente tomadas, y de manera muy especial, la pérdida de confianza de la ciudadanía que simplemente no entendemos la incongruencia entre lo que se dice y lo que se hace.

El enorme monto de deuda que presentan las finanzas públicas del Estado de Chihuahua, requiere para su pago de una disciplina administrativa que es evidente, no se tiene, de una responsabilidad gubernamental que no se advierte, pero sobre todo, de una capacidad profesional de quien o quien son los responsables de administrar, fiscalizar y supervisar el manejo y destino de los recursos públicos.

Los créditos contratados por el Gobierno de Cesar Duarte deberán ser pagados por las próximas 4 generaciones de Chihuahuenses, y los responsables de construir los cimientos para que se vaya pagando, saldrán del Gobierno en menos de 3 años; de tal forma que es entendible que poco les importe el que se presenten fugas y desviaciones de recursos.

A nivel Federal, la nueva política fiscal, eminentemente recaudadora, no contempla bajo ningún parámetro, el incorporar al régimen de causantes cautivos a los millones de personas que se encuentran en el comercio informal, porque le representa destrabar compromisos con los que apoyarán la reforma energética.

De tal forma que nos encontramos en medio de una estrategia gubernamental, que además contempla 4.5 puntos del PIB como déficit fiscal, que son más de 50 mil millones de pesos, para poder financiar los gastos del Gobierno, porque con lo que recauda no le alcanza.

Lo peor de esto, es que a la par de que se anuncia este adeudo, la federación no presenta nuevas formas de transparentar el gasto, ni el mejoramiento integral de los sistemas de rendición de cuentas, por lo que la opacidad será nuevamente la política a seguir.

SENADORA CURÁNDOSE EN SALUD

Por otro lado, comentar brevemente sobre la solicitud de la senadora Lilia Merodio ante el presidente de la República y el Secretario de Gobernación para que se le asegure su integridad personal por las amenazas de que ha sido víctima en las redes sociales.

El tener la oportunidad de representar con responsabilidad a una comunidad, implica cuando menos el rendir cuentas sobre su actuar y el dar la cara cuando se toman medidas que van en contra de los intereses de quienes se representa; las amenazas son criticables y negativas, pero más criticable es actuar como lo hace el avestruz, metiendo la cabeza en un hoyo cuando hay problemas, pretendiendo que no escuchando a nadie es como se solucionan las cosas