No es que mucho me importe, pero hablando de deporte, ¡Hay que decirlo...!
La disputa feroz que se libra entre los multimillonarios Carlos Slim, Emilio Azcárraga y Ricardo Salinas Pliego por el control de las telecomunicaciones en México, ha sido llevada más allá del ámbito empresarial para llegar al deportivo y particularmente al fútbol.
Se sabe que Carlos Slim es dueño de equipos como Pachuca, León, Estudiantes y Real Oviedo.
Ricardo Salinas Pliego es propietario de Morelia, Jaguares, y recientemente El Atlas.
Por su parte Emilio Azcárraga tiene al América y al Necaxa.
Muchois millones de dólares mueven estos magnates a través de las empresas que controlan, incluso con incursiones muy provechosas en otros países de América Central, Sudamérica y Europa.
Sabemos que el fútbol es quizás el deporte que cuenta con el mayor número de seguidores en el mundo y México no es la excepción.
La pelea fuerte se está dando entre Slim y Azcárraga, ya que sus equipos disputarán la final del balompié nacional con el América y el León.
Aquí la cuestión es que el futuro del fútbol se dará entre las transmisiones en la televisión abierta y las de paga.
Muchos mexicanos no cuentan con señal de cable, y por lo pronto, el juego entre América y León solo se verá en televisión de paga y no en televisión abierta.
El Domingo 15 de diciembre se verán muchos rostros tristes por ese motivo.
¿Y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes?
¡Muy bien, gracias! Sirviendo como siempre al gran capital.
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